lunes, 9 de mayo de 2022

GA266b-9 Oslo 18 de junio de 1910 -Iniciación egipcia e iniciación druida.

Índice 

Rudolf Steiner 

LECCIONES ESOTÉRICAS

LECCIÓN 9

Oslo 18 de junio de 1910 - Transcripción A

Iniciación egipcia e iniciación druida. El Camino Rosacruz. Explicación de la frase En los rayos puros ... con respecto al Espíritu de Cristo. El proverbio rosacruz. Peligros del engaño en la meditación.

En las antiguas escuelas de misterio egipcias, los iniciados resolvían dedicar su encarnación por completo a la iniciación, que era un procedimiento de vida o muerte. Por ejemplo, debían someterse a pruebas que exigían mucho de su valor. Se les mostraban cosas que podían despertar su miedo hasta un punto tal que caían muertos. Pero si superaban estas pruebas con vida, habían llegado a la otra orilla y habían nacido de nuevo. Habían descendido al Dios que llevan dentro y habían tenido que enfrentarse a sus pulsiones, deseos y pasiones en sus propios cuerpos, y habían superado el encuentro victoriosamente. Ahora podían decir de sí mismos: Ex Deo nascimur. - Ahora bien, uno podría preguntarse: este mal que uno encuentra en el camino hacia el Dios interior, ¿también proviene de los dioses? <Siempre debemos decirnos a nosotros mismos que eso era originalmente divino, que sólo nosotros, los humanos, lo hemos hecho malo.

En los Misterios Druidas se seguía el camino del éxtasis. El iniciado se unía al espíritu que estaba en toda la naturaleza: Per Spiritum Sanctum reviviscimus.

En el Camino Rosacruz, ambos caminos están unidos, es decir, se toma lo bueno para nosotros de ambos. El hombre moderno ya no puede iniciarse inconscientemente. Desde que se introdujo el principio crístico, el hombre debe estar presente con su conciencia despierta.

Las meditaciones que nos dan los Maestros de la Sabiduría y de la Armonía de las Sensaciones están todas dirigidas al Cristo, aunque el nombre no aparezca en ellas. Las palabras....

En los puros rayos de luz
La divinidad del mundo brilla

están dispuestas de tal manera que si uno se hace sordo y ciego al entorno más cercano, eleva lentamente su cuerpo etérico fuera del físico; y así se une entonces con el aura etérica crística, que después de todo ahora es el aura de nuestra tierra. - Si nos eleváramos fuera del cuerpo sin el contenido de nuestras meditaciones, nuestra alma estaría sola consigo misma. Pero ahora está impregnado por el Cristo y experimenta lo que Pablo llamó: "Ahora no vivo yo, sino Cristo en mí". 

En el amor puro por todos los seres
La divinidad de mi alma brilla

En estas palabras se nos recuerda que todo lo que tiene alma está tejido de amor. Esta meditación es una muerte lenta del yo inferior.  Y con este morir y revivir en Cristo, tenemos la conexión entre los dos caminos: In Christo morimur. Es un renacimiento consciente en el Espíritu de Cristo. Por eso hemos añadido la palabra Sanctum a las palabras Per Spiritum. 

Descanso en la divinidad del mundo
Me encontraré a mí mismo

En la divinidad del mundo


Transcripción B

Constituye una de las mayores ventajas que alcanza el esoterista cuando aplica fielmente lo que los Maestros de la Sabiduría y de la Armonía de las Sensaciones han reunido en imágenes o frases correspondientes. La siguiente es una explicación de la meditación: En los puros rayos de luz... Se ha demostrado cómo uno se libera gradualmente del cuerpo y entra así en el mundo espiritual. En la segunda parte de la meditación, el esoterista penetra al mismo tiempo en su propio ser interior. Lo que antes debía experimentarse por separado, ahora, después de que la humanidad haya progresado más, tiene lugar simultáneamente.  Estas meditaciones se basan en esto. Cuando uno se ha vuelto tan fuerte que se siente transportado fuera de su cuerpo a un mundo espiritual, entonces el siguiente paso es que uno comienza a percibir algo en ese mundo; pero como al mismo tiempo uno también penetra en su ser interior, también experimenta los peligros de la ilusión con mayor fuerza. En ese momento, las fuerzas de la tentación se apoderan de nosotros y evocan imágenes que luego tomamos por realidades; pero precisamente las visiones más bellas, más nobles, son las más profundas ilusiones. Sólo mucho después de haber alcanzado el poder de ascender al mundo espiritual es posible distinguir la realidad de la ilusión. Sólo la más profunda seriedad con la que se adquiere la Teosofía trae esta posibilidad. Si siempre llevamos en nuestra conciencia despierta los conceptos que nos da la Teosofía, entonces creamos aquí la realidad para el mundo espiritual y, cuando lleguemos a él, también seremos capaces de reconocer lo que vemos. Al principio hay que resistirse a las visiones, no permitirlas y no, como suele ocurrir, darles más vueltas y aplicarles nuestra imaginación. Si esperamos en el sentido correcto, llegará el momento en que sabremos si es real o no. 

Traducido por J.Luelmo may.2022