AUTO CONOCIMIENTO Y CONOCIMIENTO DE DIOS
RUDOLF STEINER
El apocalipsis y la cosmología teosófica VI
Berlín, 6 de marzo de 1905
Conferencia 9
Hoy quiero continuar las reflexiones de las últimas horas para proseguir después con el apocalipsis, que si abordamos el documento con los conocimientos que hemos adquirido en las últimas horas, ahora puede producirse muy rápidamente. Estos son los ideales del iniciado, mirarlo todo con la impresión de que se hará realidad. Pero también debe ser posible crearlo, no sólo de la nada.
Nuestra ronda concluirá con una absorción del mineral; luego, en la siguiente, el reino vegetal como reino inferior -- físico es todo lo que se puede ver; lo mineral está sujeto a leyes químicas y físicas. Seres minerales son también todos los demás seres de la naturaleza; la planta también tiene un proceso químico.
Todos los reinos son minerales. Por lo tanto, la cuarta ronda es la ronda mineral.
La quinta ronda ya no tendrá nada mineral, con sólo el reino vegetal en el fondo. En la quinta ronda se establecerá un orden mundial moral. El bienestar del individuo no será otro que el de todos los demás seres. El karma se cumplirá. Se cumplirá ya en la próxima raza, -la sexta-, la cuarta ronda. Se realizará en la quinta ronda, -no más cristal-, todo será un gran jardín a modo de brote [hueco en la transcripción].
Todo se transforma en un ser en crecimiento.
En la cuarta ronda se forma la mente. Mientras el hombre comprenda con el intelecto [laguna en la transcripción]
Lo viviente no es captado por el intelecto, sólo los puros de espíritu lo comprenderán. Hay que aprender a pensar sin usar los sentidos. Goethe y Platón tenían tal pensamiento. Este es el curso hasta la quinta ronda. Actualmente vivimos en la quinta raza raíz.
Los atlantes aún no tenían una mente sobria. La vida se entremezclaba con una clarividencia apagada.
La primera raza raíz, la raza polar, sólo podía vivir como vivía, la tierra era de sustancia más fina y de alta temperatura. Era una sustancia etérica fina. Las almas encarnaban en esta sustancia. Eran seres humanos de otro tipo: seres etéreos.
La reproducción era así: las personas eran alargadas, las manos aún no estaban desarrolladas - los seres se dividían, un ser entregaba al otro. Aún no existía la muerte. La muerte sólo tuvo lugar durante la segunda raza. La primera raza vivía en la zona alrededor del polo. Las condiciones de calor eran diferentes. Cada ser estaba lleno de alma. No había muerte. La tierra se enfriaba cada vez más y la materia ya no podía reproducirse de la misma manera. El alma perdió la capacidad de afectar a la materia de la primera manera y creó otros órganos para la reproducción. Los seres hijos eran ahora más pequeños, y ahora los seres podían absorber más materia para efectuar la división. Los seres hijos eran muy pequeños al principio, pero luego crecían muy rápidamente. El producto químico muere. Ahora los seres tenían que desarrollar nuevos órganos. Pues en la segunda raza aparece la sensibilidad. En la primera raza, sólo estaba presente el sentido del oído. Todo el entorno era sonido. Se percibía el sonido.
En la segunda raza, se añadió el sentido del tacto. Los humanos empiezan a diferenciar el calor. Este es el período Hiperbóreo. La segunda raza son los Hiperbóreos. La tercera raza, los lemúricos, desarrollaron algo muy especial. Antes, el hombre se alimentaba del calor externo, pero ahora la Tierra se volvía cada vez más fría y se produjo una especie de reacción. Los humanos tenían ahora su propio calor, mientras que antes los seres no podían tener su propio calor.
Calor intrínseco para la tercera raza.
El alma se convirtió ahora en escenario de su propia vida. Expresión del kama en el cuerpo físico. Mediante la vida emocional los seres podían absorber el calor exterior. Por lo tanto el hombre ahora se convirtió en una llama. -
En aquella época, antes de que el hombre fuera capaz de generar calor interior, los instintos y las pasiones estaban aún sin desarrollar, según el sentido del mundo exterior.
En el primer período de la raza lemúrica los seres eran bisexuados, hombre-mujer, de doble sexo. Luego el ser se dividió, aparecieron el hombre y la mujer.
Los seleccionados fueron guiados desde la Atlántida hasta el desierto de Gobi, de donde surgió la quinta raza raíz, -nuestra actual raza raíz-, que debía entrenar la mente en particular. La primera subraza de esta quinta raza fue enviada desde Gobi a diversas partes del sur, a la India.
La primera subraza son los indios; todavía encontramos la alta cultura de este pueblo en los ecos de los Vedas. La segunda subraza son los medas-persas, los asiáticos del Cercano Oriente. Surgió la divinidad dual.
La tercera, la raza del Cercano Oriente-Egipcio.
Surgió la triple divinidad.
La cuarta, la greco-latina, también la celta, Europa meridional, Europa central, la cultura cristiana.
La quinta es nuestra raza aria, y ésta debe desarrollar preferentemente el intelecto. -- Esta raza debe descender enteramente al plano físico. La sexta subraza siguiente, sólo puede decirse en perspectiva, surgirá nada menos que de la eslava. No es otra a la subraza ulterior que la eslava; en Oriente en la raza «deprimida».
Esta subraza en su infantilismo embotado hoy [laguna en la transcripción]
La mente será absorbida por los pueblos orientales, será entonces más sentido espiritual. Puede parecer soñador, pero la mente ya está formada.
La quinta raza raíz llegará a su fin a través de una caída - la tercera raza raíz pereció a través del fuego, la cuarta raza raíz a través del agua - la quinta raza raíz perecerá a través del mal, a través de la guerra, la lucha, el mal.
Pero nos acercamos a la raza raíz moral, la sexta.
Si la sexta subraza de nuestra quinta raza raíz se forma a partir de los pueblos eslavos, entonces la séptima subraza se forma a partir de los americanos. Los restos de estos últimos serán entonces lo que son hoy los chinos, los restos de los mongoles, la séptima subraza de los atlantes, la cuarta raza raíz. Pero la espiritual, la sexta subraza alcanzará un estado físico diferente, las sustancias serán más finas, endurecimiento de lo sólido, procederá de manera consciente, proporcionará la primera subraza de la sexta raza raíz. En esta sexta raza raíz -en el centro- tendrá lugar una separación. Lo masculino y lo femenino cesarán, una regresión al comportamiento anterior. En la séptima raza, la mente alcanza la más alta perfección.
Luego a la transición al siguiente globo, a la siguiente ronda. Entonces una vida física / brecha en la transcripción]
Pero se añadirá un nuevo sentido, el sentido moral. Durante nuestra cuarta ronda, la mayoría de las personas ya participan de ese sentido, son artifices de la quinta ronda. Los que no pueden alcanzar este estado elevado no pueden seguir desarrollándose.
Los que se quedan atrás tienen una tarea muy especial.
La materialidad física ya no existe, se habrá enfriado en aquellos que no han llegado a la espiritualidad, que se han quedado en la etapa, esta etapa de la quinta raza actual de la cuarta ronda.
Estos tienen ahora una especie de inclinación hacia lo físico, y traen consigo esta inclinación. La presente ronda es la mineral, la tierra perderá esta composición.
No habría más estado físico si estos rezagados [...] no estuvieran allí para desarrollar un nuevo tipo de reino mineral. La tierra ya no entrará en estado físico. Estos rezagados representarán lo que fue representado en los lemuricos como grandes entidades que encarnaron en esta raza, -la mitad de la tercera raza-, lo que es descrito en la Biblia como la Caída del Hombre llegó a existir, el bien y el mal llegaron a existir; y los animales permanecieron [laguna en la transcripción]
Y cuando este elemento pesado se expresa, es precisamente cuando la tierra se convierte en una estrella emergente, cuando el hombre se acerca a su divinización; así es como surgieron los planetas. La formación de los planetas se produce por sí misma, así es como se forman nuevos planetas.
Al igual que algunos animales son blandos por dentro y tienen una corteza dura por fuera, estos animales ya se han endurecido de antemano, -animales lunares-, y se han convertido así en un ser materialmente perceptible. Así que las personas que han permanecido en este nivel material, que no pueden desarrollarse más, estas personas podrán entonces crear materialmente en la quinta ronda - y entonces hay algo más, un misterio.
Entonces hay algo más, un misterio. Ha llegado el momento de la revelación, y toda persona normal llegará hasta aquí. La gente llevará consigo su karma a la quinta ronda. Este karma, que han alcanzado al final de la cuarta ronda Se le ocurre entonces a un ser cuyo karma está destinado a completarse El libro de cuentas está cerrado, saldo en su karma [hueco en la transcripción] hasta ahora sólo sub-balance Seres semejantes al Sol.
[Hueco en la transcripción]
La suma del karma se expresa en su forma exterior, en su semblante.
Hoy en día el hombre puede ocultarse a sí mismo, en la quinta ronda el hombre ya no podrá ser un hipócrita - será un ser que se ha hecho a sí mismo ser. En la sexta ronda, el hombre será como Budhi; espiritualmente perceptivo, mucho más elevado, clarividencia superfísica.
El hombre se relacionará con el mundo - que le desagradará al ser. La conciencia del yo se unirá y se experimentará a sí misma en un mundo que tiene una base sensorial, tal como vive hoy su hombre interior.
Se expresará, el ser humano se habrá convertido en la palabra.
En la sexta ronda, se materializará lo que siente, pero ya no hablará -se separará lo externo, por eso Cristo dice: «Y el Verbo se hizo carne».
Será el hombre de la sexta ronda del Verbo [laguna en la transcripción].
En la quinta ronda, la vida emocional se convierte en una forma sólida.
En la sexta ronda, su entorno estará lleno de su vida.
En la séptima, habrá alcanzado la divinidad.
Toda la naturaleza ha cesado en él.
Hoy el hombre dice yo.
Nadie puede decir «yo» a otro, sólo a sí mismo puede el hombre decir «yo». El nombramiento de todos los seres es la etapa en la que despierta su yo.
La deidad se pronuncia con el yo.
Entonces llama a su nombre Jehová, que significa «indecible».
En la séptima ronda será como un gran yo-imaginación - complejo del mundo con el yo.
En el Génesis - los cuatro primeros días son las cuatro primeras rondas y luego las tres rondas siguientes son en Júpiter, luego Venus, luego Vulcano. Y la etapa de Marte ya sería ahora. Júpiter debería ser igual a Venus. El siguiente planeta, - la quinta ronda-, tendrá el estadio de Marte, el séptimo aún no puede ser nombrado, ya que este estado no puede ser imaginado; por el momento se llamará Vulcano.
El hombre se encontrará en el quinto planeta en una etapa que difiere de la actual en que es creativamente activo. Es un creador imaginario, un creador de sí mismo. Así es como se desarrolla en las siete vueltas de la Tierra.
Pero será más [laguna en la transcripción]
Será un creador, lo serán imágenes mágicas, y las imágenes en color serán realidades. Creando imágenes separadas de la materia.
El tercer reino elemental surgirá del ser humano; será lo que el esoterismo cristiano llama «gloria». El sexto planeta será así en el cuarto reino elemental.
El hombre no sólo será capaz de tejer la red de la imaginación [laguna en la transcripción].
Pues mientras que en la quinta ronda el hombre sólo es capaz de crear como apariencia, como hace hoy nuestro sol, en la sexta ronda esta imagen de color creada será un ser productivo. En Venus hoy se ha alcanzado tal estado, crear vivo, sólo se puede imaginar este estado.
Todavía no podemos hablar de la séptima.
Si el hombre pudiera mirarlo - la vista es tan chocante que no puede soportarlo. Sólo aquellos que pueden pensar sin un cerebro físico pueden imaginarlo.